Ley de propiedad horizontal: ¿Qué es exactamente?

¿Sabías que La Ley de Propiedad Horizontal este 2021 va a cumplir 61 años de recorrido? Desde su promulgación el 21 de Julio de 1960, esta ley ha servido para regular las normas sobre todo lo relacionado con pisos, locales o zonas comunes dentro de las comunidades de propietarios.

Pero, ¿sabes exactamente cuáles son sus características? ¿Y sus especificaciones? A continuación te contamos todo lo relacionado con esta normativa, además de alguna que otra curiosidad.

¿Por qué es tan importante La Ley de Propiedad Horizontal?

Esta regulación fue creada en un momento de pleno desarrollo económico en España en la que se estaban cambiando las condiciones de vida de los ciudadanos. Por tanto, necesitaban instrumentos legales para poder regular la convivencia entre ellos. Como era de esperar, estas normas además se han ido modificado a lo largo de los años con la finalidad de ir definiendo cada vez más sus límites, aunque no haya resultado con éxito al 100%.

Se debe tener en cuenta que al rededor del 80% de los españoles viven en comunidades de propietarios, lo que la convierte en una ley demasiado importante como para que se encuentre en algunos casos desactualizada. Por eso mismo, siguen habiendo muchas dudas y problemas para interpretarla y que se deben aclarar.

¿De qué hablan estas leyes?

En términos muy generales, se trata de la ley que regula las comunidades de propietarios. Por tanto, algunas de sus funciones más importantes son:

Los órganos de gobierno de una comunidad de vecinos y funciones.

Las labores de una administración de fincas.

Los derechos y las obligaciones de los propietarios

Las normas de regulación de las juntas de propietarios.

No obstante, quizá lo más complicado de definir sea el concepto de la división horizontal de una propiedad, es decir, la compartimentación de un bloque de viviendas por la cual se establecen sub-fincas. De esta manera, este concepto sirve para delimitar los locales, pisos y zonas comunes dentro de la comunidad, así como la cuota de participación de cada espacio.

En definitiva, la Ley de Propiedad Horizontal aclara las normas de funcionamiento y convivencia dentro de una comunidad, aunque como hemos comentado antes, no siempre soluciona todas las necesidades de los propietarios.

Por eso mismo, a continuación repasamos las preguntas más frecuentes relativas a La Ley de Propiedad Horizontal:

¿Qué es el Título Constitutivo de la propiedad horizontal?

También se conoce como Escritura de División Horizontal, la cual es un documento que recoge jurídicamente a cada comunidad de propietarios. Es muy importante, ya que detalla las características del edificio, los elementos privados, los elementos comunes, los linderos, las servidumbres y las cuotas de participación para cada piso o local.

Es obligatoria y su contenido viene especificado en el artículo 5 de la Ley de Propiedad Horizontal.

¿Qué es la cuota de participación?

Es ni más ni menos que el porcentaje de propiedad que le corresponde a cada propietario. O sea, que si sumamos los porcentajes de cada piso, deberemos obtener el 100% del total del inmueble.

Las cuotas vienen fijadas en la escritura de división horizontal y se basan en tres variables:

  • La superficie útil de cada piso o local.
  • La situación de cada piso o local, dependiendo si es interior o exterior.
  • El uso que se presume que cada piso o local puede hacer de los elementos comunes.

¿Qué son los elementos comunes?

La Ley distingue entre elementos privativos y elementos comunes. Por un lado, los elementos privados o privativos son aquellos de los que se puede hacer un uso individual, excluyendo al resto de vecinos ya que se tiene la titularidad privada: pisos, plazas de parking, trasteros…etc.

Sin embargo, los elementos comunes son los que tienen una titularidad compartida para su uso o disfrute por parte de todo el edificio.

Para saber exactamente cuáles son esos elementos comunes, la Ley de Propiedad Horizontal nos lo indica en el artículo 396 del Código Civil, que describe como elementos comunes:

Los suelos, el vuelo, las cimentaciones y las cubiertas.

Los elementos estructurales ( los pilares, vigas, forjados y muros de carga).

Las fachadas, con los revestimientos exteriores de terrazas, balcones y ventanas.

Los espacios como el portal, las escaleras, la portería, corredores, pasos, muros, fosos, patios, pozos y los recintos destinados a ascensores, depósitos, contadores, telefonías o a otros servicios o instalaciones comunes.

Los ascensores.

Las instalaciones, conducciones y canalizaciones (hasta la entrada al espacio privativo), para el desagüe y para el suministro de agua, gas o electricidad, incluso las de aprovechamiento de energía solar.

También se incluyen las instalaciones de antenas colectivas y otras instalaciones para los servicios audiovisuales o de telecomunicación.

¿Qué son los estatutos de la comunidad?

Hay que tener muy claro que no son lo mismo los estatutos de una comunidad y la Ley de Propiedad Horizontal. Se debe saber que los Estatutos no son obligatorios por ley, y por tanto, no todas las Comunidades de Propietarios los tienen.

Tampoco debemos confundir los Estatutos con el Reglamento de Régimen Interior, un documento en el que se detallan las normas de convivencia que afecten a los vecinos como , por ejemplo, asuntos con las mascotas, los horarios para sacar la basura o las normas en la piscina entre otros.

Los estatutos, por tanto, son documentos que describen los derechos y las obligaciones de los propietarios de viviendas y locales dentro de un inmueble, así como los usos y destinos que se les da a cada uno de los espacios. No hay ninguna regulación estándar, es por eso que para hacerlo lo mejor es contar con el consejo de un administrador de fincas.

Para más dudas, no dudes en consultar a profesionales expertos en el sector. Desde Aresi te asesoraremos para la correcta regulación de todas las normas dentro de la comunidad y gestión de esta. Como siempre, nos encontramos disponibles en el 910 585 585 o nos puede dejar tus datos a aquí.


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